En la calle Bauzá, lateral al Hospital Británico, se proyectó un edificio destinado a estacionamientos, resuelto en un predio de limitadas dimensiones y baja altura.
La solución de las plantas es en hormigón armado convencional, procurando el máximo aprovechamiento de la superficie disponible. Incluye cuatro niveles sobre rasante y dos niveles y medio bajo tierra, cuyas contenciones están resueltas con muros colados.